ANALIZANDO: BRADLEY COOPER

¿Cuántas veces hemos visto a Bradley Cooper y hemos pensando que es realmente atractivo? Ya sabéis que nosotros somos fans de las sonrisas, y la de Bradley es una de nuestras favoritas.

Desde que su sonrisa nos enamoró en el papel de buenorro en Resacón en Las Vegas hasta su último estreno, A star is Born, en la que es protagonista y director, sus retoques dentales han sido cautos, mejorando tan solo el blanco de sus dientes a través de blanqueamientos dentales muy naturales.

La sonrisa de Bradley es un reflejo de su actitud. Despreocupada y amplia, el actor muestra con ella no solo sus dientes, si no una ligera parte de su encía, es decir, presenta una leve sonrisa gingival. Además, sus paletas se encuentran ligeramente inclinadas hacia el paladar, lo que clínicamente se conoce como retroinclinación de los incisivos centrales superiores.

¿Cómo podría mejorar nuestro querido Cooper esa sonrisa con la que tanto trasmite?

Recurriendo a unas carillas de cerámica. Por si no sabéis lo que son, se trata de unas láminas ultrafinas de cerámica con un grosor inferior a 0,3 mm que se adhieren al diente mejorando su aspecto al instante y que terminarían de definir su sonrisa haciéndole generar más impacto del que ya provoca.